7/2/11

Las siete cosas indispensables (de ser grande)

Por fin me hice grande.
Terminé la universidad y conseguí un trabajo acorde a mi carrera que me da un sueldo mucho mejor que el del trabajo anterior.
Cuando sos grande sólo tenés que hacer siete cosas indispensables: comer, beber, respirar, cagar, mear, no pasar mucho frío y morirte lo menos posible.

Todas esas cosas salen plata y como por desgracia no nos tocó ser Paris Hilton, la única que nos queda es trabajar. Claro, si sos mujer podés casarte con un tipo rico y si sos un matrimonio pobre podés jugar a la quiniela, pero todos los demás tenemos que trabajar.

Además, es muy probable que quieras agregar algunos items extras, como veranear, no agarrarte SIDA, usar muebles o tener hijos (que a su vez necesitan hacer las siete cosas más la octava terrible: estudiar). Cada una de estas cosas representamás trabajo y trabajar es siempre una paja.

Si te gusta tu trabajo y tu trabajo implica levantarte de la cama en algún momento del día para hacer algodistinto a salir a pasear un poco, no sé que decirte.
No quiero decir que lo que yo quiera hacer todo el día sea estar tirado, no: yo no me paso todo el día trabajando. Digo que me gustaría ganar plata por una de las dos cosas que más me gustan hacer, pero dormir es incapitalizable.
La otra cosa que más me gusta hacer ya ha sido
 capitalizada  de las formas más diversas y humillantes.
  ¿Qué debemos hacer, entonces?

Podemos tratar de cambiar el sistema, por supuesto, pero no vamos a  lograrlo siendo discretos. Es decir, no importa que vos ahorres agua, lo que importa es que las fábricas no tiren sus desechos al agua así como si nada... Yo cierro la ducha mientras me enjabono¹, ¿eso me hace un héroe?
No sé ustedes, pero yo no pienso poner una bomba y la verdad es que tengo más ganas de ir a cenar a Sushi Club que a una reunión del Partido Obrero, por lo tanto la única opción que queda es trabajar y no sufrirlo tanto.

¿Cómo se puede hacer eso? Trabajando menos. Sin embargo, trabajar menos implica menor poder adquisitivo. Por lo tanto, para tener más por menos hay que abaratar costos.

Cagar y mear son gratis. El agua del inodoro y del bidet vienen junto al agua que ya estás pagando para beber y el papel higiénico es más un lujo no disfrutable que una necesidad. El papel higiénico no puede hacer nada por vos que no hagan el bidet y un poco de jabón (que entra en el item morirse lo menos posible).
Beber es obvio: tomá agua y punto. Es lo mejor para vos y a la corta o a la larga no tiene gusto a nada. No puede no gustarte el agua: el ser humano es 70% agua, si no te gusta el agua no aceptás la diversidad y sos un facho.

Comer es un poco más capcioso: es imposible producir todo el alimento que uno consume salvo que viva en el campo, y en el campo no hay internet.
Cómo mucho uno puede cultivar orégano, tomillo, menta, esas cosas chiquitas que no requieren espacio y tampoco alimentan². Vas a tener que comprar comida sí o sí, pero si nos las ingeniamos  vamos a descubrir que hay mucha comida gratis dando vueltas por ahí. De vez en cuando se encuentran vegetales tirados en parcial perfecto estado, los micros de larga distancia tiran las viandas no comidas después de cada viaje, ¿por qué incluso no cazar palomas?
Grasa transgénica, hormonas y mierda
Deben ser mucho mejores las palomas que esos pollos llenos de grasa transgénica, hormonas y mierda que compramos en el super. Tanto a nivel salud como a nivel sabor.
Sé que es una idea difícil de aceptar, que parece que lo dijera en chiste...

La dejo ahí picando, piénsenlo.

Respirar es gratis y si deja de serlo va a pasar a estar incluido en los impuestos, así que no hay mucho para hacer al respecto. Evadir impuestos y tener esclavos bolivianos es una mala estrategia para ahorrar algo inahorrable: ¿cuánto vale el mal karma? Según un montón de powerpoints que me reenvió mi mamá, mucho.

No pasar mucho frío aglutina dos cosas importantes: la ropa y la casa.
La ropa no es un problema: hay mucha en el mundo, demasiada. Hasta los pobres tienen ropa. Y con un poco de imaginación en tu outfit podés verte bien usando cualquier cosa, incluso esa remera horrenda que compró tu mamá en algún viaje en el 1 a 1.
Se llama ser hipster (▼FOTO▼ )
La casa, por su parte, no sólo nos protege de las inclemencias del clima sino que también nos da un espacio privado para hablar solos, oler mal y emborracharnos, todas esas cosas que los pobres linyeras tienen que hacer en la vía pública.
La casa es el único item en el cual no siempre conviene ahorrar porque su buen mantenimiento colabora mucho en nuestro estado anímico.
Bueno, tampoco conviene ahorrar en morirse lo menos posible, pero sólo hasta cierto punto de tu vida. Cuando ya es obvio que te morís en dos patadas hay que dedicarle esa plata a cosas fuera de las siete cosas indispensables.

Hasta aquí, mi humilde aporte sobre tan complejo y delicado asunto como el tratado.
Espero haber podido serles de ayuda y espero a su vez que ustedes me sean de ayuda a mí al compartir sus tips, consejos y experiencias y así poder  juntos ahorrar la mayor cantidad de dinero posible para comprar alcohol y porro y ser felices³.




Notas al pie
1. De verdad lo hago.
2. Sin embargo, es importantísimo hacerlo. Así como cultivar nuestras propias plantas de porro.
3. No alcanza con el porro que cultives, vas a tener que comprar más.

5 comentarios:

  1. en la muestra de marta minujín, en el malba, hay una parejita a la que le pagan por dormir.

    fijate

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  2. Increible lo suyo maestro...un abrazo.
    Camcienfuegos.

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  3. Hola. Deberías saber que toallín de south park fue creado inspirado en vos.

    Besitos!!

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  4. Hay que vivir de a muchos, los hippies descubrieron eso hace tiempo pero nadie los escuchó
    ahora los hipsters se ponen cualquier cosa y todos se copan
    FACHOS!
    SON TODOS FACHOS LOS QUE LEEN ESTO!!!
    LA CONCHA DE LA MADRE

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